Espero que al recibir esta carta esté donde yo deseo que estés. Quiero que sepas cariño que por estas estamos bien, sabemos que tú estás bien pues en el cielo estás con los seres que te quisieron: tu padre, tu abuela y la mía, y, mis tíos, pues en otro sitio tú no puedes estar, en la tierra te portaste como persona cabal, no cometiste grandes pecados y quisiste a los tuyos como madre, esposa, hija, nieta, y sobrina, sabemos que no puedes estar en otro sitio pues tu vida la diste por los demás.
Yo se que estás ahí porque cuando miro al cielo siempre veo algo que me recuerda a ti, una nube que pasa, una estrella que brilla, el sol cuando amanece o se pone por el poniente, un lucero que me recuerda a ti a tu cara, tus ojos y tu alegría.
Sé que estás ahí porque mi corazón me dice que nos sigues vigilando, ayudándonos y orientándonos en este mundo de ilusiones, de esperanzas, de locuras, de alegrías y de sufrimiento,, sé que tú nos das las suficientes pautas para seguir, basta que sigamos tú ejemplo de sufrimiento en silencio con tu sonrisa eterna.
Sé que tú nos guía y que nosotros no te olvidamos.
Espero que recibas esta cara en tu destino y la leas a todos los que tú quieras, sobre todo a los que te quisieron en esta vida.
Un abrazo de todos los que te quisimos y no te olvidamos y de mi parte un beso de cariño y de amor.
Agustín
En Viladecans a 30 de mayo del año 2010
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